
Los más jóvenes viven una situación cuanto menos difícil al intentar adentrarse en el mundo laboral. La precariedad es un estigma para este tipo de perfiles ya que es una situación que se ceba especialmente con ellos, lo que incrementa aún más la inestabilidad generada por el coronavirus y la crisis consecuente. Sin embargo, no todo es negativo.
Las nuevas generaciones están demostrando una capacidad de resiliencia muy por encima de la que tenían sus predecesores y no solo eso, también están transformando la manera de trabajar y captar el talento. ¿Qué es lo que hace tan especiales a estos candidatos?
Perfil Z: Nativos digitales
La generación Z la componen las personas nacidas entre 1994 y 2010. Según el documento consultado, puede haber variaciones año arriba, año abajo, pero en esencia son los jóvenes que se encuentran a las puertas del mundo laboral a día de hoy.
Estas personas, ahora sí, son completamente nativos digitales. Esto aporta una nueva manera de ver, comprender e interactuar con el mundo. Entre muchas otras cosas, los también llamados centennials están acostumbrados a la inmediatez, al acceso total a la información y a lo efímero de las tendencias, además de la multiplicidad de lenguajes y contenidos de las redes y plataformas que frecuentan.
Todas estas facetas que componen la realidad de la generación Z, les hace ser mucho más dinámicos; demostrando cualidades para procesar información con rapidez y desde distintas fuentes.
Tocando con los millennials, estos expertos en tecnología tienen aptitudes proactivas, acostumbrados a buscar formación y aprender por cuenta propia.
En búsqueda del Talento Z
De acuerdo con el informe elaborado por Deusto y ATREVIA, “los Z son una generación que no viene a trabajar, sino a vivir una experiencia profesional que les satisfaga, afín a su forma de entender el mundo en el que viven: interrelacionado, transparente y marcado por la imagen”.
Para estos perfiles entrar en un buen ambiente laboral, la conciliación y la posibilidad de desarrollarse profesionalmente son factores determinantes a la hora de buscar empleo. Prioridades que destacan sobre otras como la estabilidad o el salario.
Otra de las cuestiones indispensables es la digitalización: Las nuevas generaciones utilizan internet para todo, lo que incluye buscar empleo e interactuar con las empresas. Acceder a este nuevo talento exige actualizar, repensar y rediseñar los procesos de selección.
Los centennials buscan lugares donde se hable su mismo idioma; donde sentirse a gusto y se les valore. ¿Y las empresas? En esta nueva etapa los perfiles que más se demandan son aquellos versátiles, multitarea, pluridisciplinares y con capacidad para el aprendizaje y la adaptación.
Llegar a todas estas cualidades es un reto más que recae sobre los procesos de selección; las empresas tienen que empezar a incorporar herramientas para destacar e identificar el talento, como las pruebas LBFOX Global.
Preocupaciones de la Generación Z
Para poder acceder a este talento y atraerlo, las empresas tienen que conocer sus preocupaciones y dar respuesta a sus necesidades.
Según el informe Jóvenes Españoles 2021 de la Fundación SM, para las nuevas generaciones la educación, la familia y la salud son los tres pilares fundamentales. Así mismo, medioambiente e igualdad de género son temas de gran relevancia entre los jóvenes.
La pandemia de la Covid-19 también ha impactado de forma notable entre los centennials que sienten una gran preocupación por el desempleo y la precariedad. Tanto es así que el 52% ve muy probable tener que emigrar para encontrar un trabajo de calidad.
Claves para llegar a los centennials
1. Alinearnos con sus intereses y preocupaciones
Trabajo de calidad, ambiente digital y modernizado, formación, conciliación… Cubrir sus necesidades básicas y adecuarnos a su estilo de vida es vital si queremos atraer el Talento Z.
2. Autenticidad
La generación Z busca entornos transparentes, lugares donde poder desarrollarse de verdad y que cumplan sus expectativas. La búsqueda del entorno ideal les vuelve muy exigentes y no se quedarán si lo que hay no les satisface. Priorizan el bienestar sobre la estabilidad en un lugar que no les llena.
3. Responsabilidad Social Corporativa
Se trata del equilibrio entre personas, medioambiente y empresa. Cuestiones como la optimización y uso responsable de los recursos y la diversidad laboral, son de gran importancia para los más jóvenes. Potenciar la ética en las prácticas empresariales, mejora la imagen de la marca.
4. Transformar los procesos de selección
A las nuevas generaciones les interesa tener opciones y elegir aquella empresa que más se adapte a ellos. En este sentido observamos un cambio en la dinámica de la selección de candidatos. Atraer el talento es el primer paso.
La digitalización de los procesos de selección es igualmente indispensable; se necesitan plataformas familiares y amables con los candidatos. En este contexto, llegar a identificar el talento es uno de los retos que los departamentos de recursos humanos deben superar y para los que deberán adaptarse a las nuevas tecnologías emergentes.
La primera plataforma de empleo que te permite demostrar
tu verdadero Talento